Seguimos analizando las diferencias del trastorno de límite de la personalidad y la bipolaridad así como también las claves básicas para reconocerlos.

Diagnóstico preciso: Generalmente, las personas con TLP tienden a ser muy conscientes de sí mismas. Una simple lectura de los signos y síntomas a menudo es evidencia suficiente La mayoría están abiertos sobre sus tendencias auto-perjudiciales y tienen un deseo genuino de no seguir involucrándose en ese comportamiento. Sin embargo, por lo general no hablan abiertamente sobre los síntomas disociativos hasta que se identifica. Muchos con TLP no son conscientes de que este es un indicador clave en el diagnóstico.
Temor subyacente: El temor al abandono está omnipresente en las personas con TLP. Esto es con frecuencia la fuerza motriz en sus reacciones intensas. Vincent Van Gogh, que es conocido por sus pinturas post-impresionistas a finales de 1800 se cree que tenía TLP. Su pintura más famosa es «Noche estrellada» la que pintó mientras estaba de asilo en Francia. Fue hospitalizado después de cortarse parte de su oreja izquierda porque estaba angustiado por el abandono de su compañero de casa y pintor Paul Gaugin. Habían estado viviendo juntos durante tan solo nueve meses.
Tratamiento: Las personas con TLP responden bien a la terapia cuando encuentran la persona adecuada y el tratamiento. Desafortunadamente a menudo se necesitan varios terapeutas y enfoques diferentes antes de encontrar la combinación correcta. Una persona con TLP no disfruta de perder relaciones y está abierto a probar nuevas técnicas con el fin de mejorar su conexión con los demás.
Hospitalización: No es raro que una persona con TLP haya sido hospitalizada varias veces debido al comportamiento auto-perjudicial. Sin embargo, la hospitalización a corto plazo se refiere a la estabilidad, no al tratamiento. A menudo, el mejor tipo de tratamiento es en un centro hospitalario especializado en TLP. Dentro de este ambiente, las técnicas para manejar la vida en el exterior pueden ser aprendidas, practicadas y desarrolladas en una atmósfera de aceptación segura.
Pasión: Si hacemos un vistazo rápido a las 900 pinturas que Vincent Van Gogh generó en su corta carrera de 11 años revela a una persona con un profundo celo por la belleza, la expresión y la creatividad. Mientras que su vida personal y profesional era un lío, sus pinturas ahora cuelgan en los mejores museos del mundo. Su capacidad para expresar magníficamente sus emociones y pensamientos a través del arte son ahora legendarias.
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